RIVER MONZÓN 7 – ATCO. SABIÑÁNIGO 1

RIVER MONZÓN: González, Pizarro, Pascual, Montaner, Saura, Revilla, Sorinas, Alfonso, Yusufu, Claver, Burgos, Sas, Cónsul, Tejada, Pueyo y Carrera.

ATCO. SABIÑÁNIGO: Serrano, López, Gómez, Arduzza, Lanuza, Echevarría, Jiménez, Lacasa, Maizal, Ricardo Giménez, Granada, Sergio Jiménez, Brun, López, Ballester y Chamorro.

Buen partido del River que salió con ganas de enmendar el resbalón de la semana anterior. Ya en el minuto 5, a la salida de un córner lanzado por Claver, Yusufu remata al poste, y él mismo recoge el rechace y hace el 1-0. Tres minutos después, Javi Claver lanza una falta desde la izquierda y coloca el balón en el poste contrario llevando el segundo gol al marcador. En el minuto 12, una jugada que nos activa la memoria: balón de Joel Alfonso para Claver en la línea de medios, balón en profundidad para José Revilla, que de primera y desde el borde del área centra raso al hueco entre la defensa y el portero y Yusufu a la carrera remata con el interior haciendo el 3-0 (el segundo gol en el campo del Salesianos tuvo parecida ejecución y repiten algunos de los actores). En el minuto 25, un balón bombeado al área local, no es despejado por la defensa y cae a los pies de Ricardo Giménez que hace el 3-1.

En el segundo tiempo, se acrecentó el dominio local, sobre todo partir del minuto 18 en que Sas recoge un rechace del portero y lleva el 4-1 al marcador. En el minuto 25, al saque de un córner y tras centro de Claver, Sas nuevamente hace el 5-1, en el 27 Yusufu marca el 6-1 y en el 30, Adrián Sorinas, en jugada personal desde el centro del campo y tras sortear a varios contrarios hace el definitivo 7-1.

Máxima eficacia del River frente a la portería contraria y mejora del juego en la segunda parte, con la defensa que se mostró contundente y Claver mostrando un buen repertorio de pases.

Escuela de Futbol River Monzon / Dep. Prensa.

LA LITERA 3 – RIVER MONZÓN 1

LA LITERA: Adrián Sisó, Almuara, Laforga, Peroles, Llasera, Fandos, Prieto, Fondevilla, Sales, Samuel Benedicto, Rubén Benedicto, Carlos Sisó, Sabau, Vidal, Mariblanca y Plana.

RIVER MONZÓN: González, Pizarro, Pascual, Montaner, Ladyzhenskyy, Revilla, Sorinas, Claver, Saura, Yusufu, Mendoza, Cónsul, Sas, Aljaro, Mairaly Carrera.


Segunda derrota del River en el campeonato. Y a tenor de lo desarrollado por unos y otros sobre el terreno de juego hay que considerarla justa. No hay que buscar excusas ni en la dureza del equipo literano en algunas fases del encuentro, ni en alguna de las decisiones arbitrales: del árbitro sólo se acuerdan los perdedores.

Comenzó ésta vez el partido con dominio del River, que a los 4 minutos se adelantaba en el marcador tras buen disparo de Yusufu al saque de un libre indirecto dentro del área. Continuó el dominio visitante hasta mediada la primera parte, cuando en una de las primeras aproximaciones locales hasta el área montisonense, un mal despeje de la zaga propicia que en la segunda jugada la pelota caiga a los pies de Rubén Benedicto quién sólo frente a Martín González hace el 1-1. Los literanos se animaron y a base de fuerza y con desplazamientos largos pasaron a equilibrar el encuentro. Pocos minutos después, un disparo elevado desde fuera del área sólo permite a Martín rechazar el balón, que queda muerto en el área pequeña y Sales se anticipa a la defensa haciendo el 2-1. A partir de aquí los literanos se crecen y a base de garra y determinación en la disputa de cada balón, logran llegar al descanso con el marcador a su favor.

La segunda parte fue cuesta arriba para el River. Tras unos primeros minutos de dominio visitante, en los que parecía que el empate estaba cerca, los locales se afianzaron en su juego, con mucho contacto y ardor en la disputa de cada balón. El reloj volaba y no había manera de hincarle el diente al partido. Y así, en una contra llegó el 3-1 por parte de Rubén Benedicto. Aunque el River lo siguió intentando, ya no hubo variación del marcador hasta el final.

De las derrotas también se aprende; probablemente más que de las victorias. La Litera supo llevar el partido al terreno que más le convenía, y el River no supo salir de ahí. Los buenos equipos tienen que saber imponer su juego y su estilo.

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ALMUDÉVAR 1 – RIVER MONZÓN 10

ALMUDÉVAR: Justes, Huerto, Aso, Barluenga, Ferrer, Aomar, Sánchez, Abad, Lisa, Piracés, Puértolas, Abadía, Usieto, Callejas, Atarés y Lobato

RIVER MONZÓN: González, Pizarro, Pascual, Montaner, Saura, Revilla, Sorinas, Alfonso, Yusufu, Claver, Cónsul, Burgos, Mendoza, Aljaro, Pueyo y Ladyzhenskyy.


Dos partidos en uno. El de la primera parte, donde los locales mantuvieron el tipo dignamente y el River actuó con la pereza que ya se empieza hacer habitual en los inicios. Se inició el partido con dominio de los visitantes, que desaprovecharon una primera ocasión por parte de Yusufu. Corría el minuto 10 cuando el Almudévar se estira por primera vez y tras un buen disparo desde la izquierda, rechazado por Martín, Abad totalmente solo y sin ningún defensa que hubiera seguido la jugada hace el 1-0. Todavía tuvieron los locales una nueva ocasión minutos después con remate franco en el segundo palo que salió rozando el poste, y que llevó los nervios y la desconfianza a los visitantes. El juego no era fluido y hubo que esperar hasta el minuto 27 para que Adrián Mendoza, atentado a un rechace del portero y porfiando con la defensa local lleva el 1-1 al marcador, con el que se llegó al descanso.

En la segunda parte cambió totalmente la decoración, y ya en el minuto 1 Yusufu encara al portero, y tras regatearle hace el 1-2 a puerta vacía. Un minuto después, es Mendoza en jugada llevada desde el centro del campo y tras buena pared con Yusufu el que hace el 1-3 de disparo desde la frontal del área. En el minuto 7 y en el 15 nuevamente Yusufu eleva el marcador hasta el 1-5. En el 17, Adrián Sorinas hace el 1-6 y en el 25, Claver el 1-7. A los 26 minutos es Aljaro el que hace el 1-8, en el 27 Cónsul el 1-9 y en el 29 Sergio Pueyo cierra la cuenta con el 1-10 definitivo. Difícil de explicar la diferencia entre la primera parte y la segunda; ya empieza a ser habitual que al River le cuesta entrar en los partidos, pero aún así esta vez se han superado los precedentes: si al descanso hubiéramos hecho una porra no creo que nadie de los que presenciamos el partido hubiéramos acertado. Se propone una solución: que el River empiece a jugar los partidos con media hora de antelación.

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RIVER MONZÓN 3 – FRAGA “A” 2

RIVER MONZÓN: González, Pizarro, Pascual, Montaner, Saura, Revilla, Sorinas, Alfonso, Yusufu, Claver, Mendoza, Sas, Cónsul, Burgos y Mairal.

FRAGA “A”: Castello, Clemente, Guillén, López, David, Marfil, Labrador, Cartagena, Arce, Reyes, Martí, Badía, Arner, Sisó, Salinas y Carrasco.


Mereció mejor suerte el equipo fragatino en su visita al Antonio Alcubierre a tenor del juego desarrollado. Ya desde antes del pitido inicial se vio el orden y la buena colocación sobre el campo, y cuando la pelota echó a rodar vino la confirmación. El centro del campo era rojillo, donde siempre había más jugadores visitantes cerca de la pelota y Adrián Sorinas no daba abasto. A los 17 minutos, a la salida de un córner López se adelanta a la defensa y lleva el 0-1 al marcador. Cuatro minutos después, Yusufu aparece por primera vez y por encima del portero iguala el marcador. En la segunda parte vuelve a aparecer Yusufu a los 12 minutos con una magnífica volea que se cuela por la escuadra izquierda adelantando a los locales. Parecía que el partido iba a encarrilarse definitivamente a favor del River, pero los fragatinos no bajaron los brazos y sobre todo a través de Cartagena continuaron poniendo en jaque a la defensa local. Así a los 18 minutos, avance por la izquierda de los visitantes y Reyes hace el empate rematando con un buen gesto técnico. El partido podía decantarse hacia cualquier lado, pues ahora ya no había control en el centro de campo y a cada acometida del River respondía el Fraga con peligrosos contraataques frente a los que Montaner mantuvo el tipo en el centro de la defensa local. En el minuto 21, Cónsul se hace con un rechace dentro del área y hace el 3-2, que ya resultó definitivo, aunque los locales acabaron pidiendo la hora.
Esta vez hubo más pegada que juego por parte de los locales, que aprovecharon todas las oportunidades de que disfrutaron, frente a un rival que causó una magnífica impresión y que no mereció perder, destacando su número 9 David así como el golpeo de balón Labrador y la fuerza y velocidad de Cartagena.

Escuela de Futbol River Monzon / Dep. Prensa